Hoy hace 75 años que el Levante FC, el Levante de mi abuelo, ramo ancestral del actual Levante Unión Deportiva, ganó la Copa de La República de 1937 en plena Guerra Civil en Valencia. A pesar de las numerosas peticiones por parte de historiadores y escritores, con argumentación y documentación impecable, se han visto frustrados una y otra vez los intentos de los levantinistas en ganar el reconocimiento oficial del título. Durante la dictadura el reconocimiento de una copa disputada en el otro bando era impensable. Sin embargo, en los más de 20 años después de la transición a la democracia en España, todavía no se reconoce oficialmente el título por razones políticas porque las razones que se citan oficialmente han sido batidos una y otra vez por investigadores y historiadores...
Hoy, con motivo de este aniversario, no quiero dejar pasar el momento sin hacer una petición sentimental porque yo sinceramente creo que mi abuelo recibió una alegría cuando se enterró del título copero del Levante, un Levante del que imagino que era aficionado y que seguía con interés en su Cabanyal nativo durante los años 20, con el juego dominante y virtuoso de una generación de jóvenes, unos años menor que mi abuelo, conocidos como Los Invencibles...
En estos años iniciales de la Guerra Civil, mi abuelo, Vicente Sanchis Amades, posiblemente recibió noticias de sus seres queridos en El Cabanyal mediante cartas escritas mandadas hacia su país adoptivo, Estados Unidos. Eran momentos muy complicados para él, ya que estaba viviendo la agonía, incertidumbre y sufrimiento de la Guerra Civil Española desde lejos, sin saber si sus seres queridos en El
Cabanyal tenían comida o un techo, ni siquiera si permanecían vivos.
No puedo decir con toda seguridad pero imagino que mi abuelo ya habría intentado volver a España en 1937 cuando el Levante ganó la Copa de la República. Seguramente le faltaba el dinero para emprender el viaje. Al final logró otra maniobra para volver a España y poder luchar por su país. En 1938, mi abuelo logró volver a España, formando parte de la mítica brigada norteamericana, la Abraham Lincoln.
Pensar en el auténtico terror y sufrimiento que pasó la gente de España, era importante el labor de aquellos futbolistas que participaron en el torneo de la República. Durante 90 minutos ellos mismos podían escapar de las trincheras, de un mundo en ruinas y, lo que es más, hacer escapar y disfrutar a una gente sufrida, sin una realidad estable ni muchos motivos para estar alegre. Ningunear aquellos héroes y estos logros únicos, y no sólo llamo héroes a los futbolistas del Levante sino a todos aquellos jugadores que participaron, es una vergüenza pero peor aún es un intento de robo a la gente en el bando republicano de su dignidad y su humanidad. Negar el reconocimiento del título del 37 es casi como si negaran la existencia de aquellas personas que participaron en el torneo de alguna forma. Es hacer de la historia una burla.
Todavía se puede arreglar esta historia. Todavía se puede ganar para nuestros ancestros y los viejos héroes de nuestro club el reconocimiento que les debe la historia. Muchas veces el Levante utiliza el lema "un futuro por conquistar". Tiene un sitio privilegiado hasta en una columna en la Ciudad Deportiva en Buñol para promover el lema a los más jóvenes. Sin embargo, los levantinistas también tenemos "una historia por conquistar" y hay que ir a por ella. #VolemLaCopa
No hay comentarios:
Publicar un comentario